Para los que hemos vivido un tiempo fuera de nuestro país seguro que este artículo les resulta familiar y muy interesante, además de ponerle nombre a un cúmulo de sensaciones que experimentamos mientras que estábamos fuera y que no sabíamos ni cómo expresar ni cómo canalizar.
En psicología, se le ha llamado SÍNDROME DEL VIAJERO ETERNO O CHOQUE CULTURAL.
Después llegó el momento de volver a casa y, ni nada ni nadie estaba cómo lo dejamos, la vida siguió sin esperarnos. Estos sentimientos enfrentados quedan muy bien reflejados en este artículo que viene a continuación.
Espero que os guste además de aclarar muchas ideas…